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Si no empezamos a poner remedio ahora, dentro de pocos años puede ser demasiado tarde
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El cambio climático o calentamiento globalArtículo de opinión de Pedro Domínguez Gento
En Alzira alcanzamos los 42ºC hace un par de semanas. Y, si no cambiamos durante el presente siglo, las temperaturas medias pueden aumentar hasta 7 ºC más
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Natura
Pedro Domínguez Gento
Según los expertos del IPCC (organismo internacional que agrupa a miles de científicos de todo el mundo), durante el siglo XX, las temperaturas globales subieron 0'8 ºC, un aumento aparentemente pequeño pero de graves consecuencias porque ha reducido las masas de hielo e incrementado las sequías, los fenómenos atmosféricos violentos, los incendios forestales, la erosión, la desertificación, la pérdida de biodiversidad, las plagas, las enfermedades tropicales...
Si las temperaturas continúan aumentando las consecuencias pueden llegar a ser catastróficas: fusión total de los polos, elevación del nivel del mar, inundación de las tierras costeras (las más fértiles y pobladas), salinización de pozos, pérdida de cultivos y del turismo, hambre, migraciones masivas hacia el interior, aumento del racismo y la xenofobia, más conflictos, guerras, refugiados, epidemias, extinción generalizada de las especies que no puedan adaptarse a cambios ambientales tan rápidos... Y lo que es peor, podemos desembocar en un proceso retroalimentado donde el mismo calentamiento global origine nuevos problemas que lo intensifiquen hasta convertir la superficie del planeta en un horno incapaz de sostener la vida actual.
¿Qué haremos en la Ribera si subimos hasta los 48 o 50ºC?
¿Podremos seguir viviendo aquí o se convertirá esto en otro Sahara?
En Valencia, por ejemplo, los datos del Observatorio Meteorológico de Levante (el más antiguo del PV) indican que las temperaturas han subido 1'5 ºC durante el siglo XX y que estamos batiendo records de calor año tras año; en Alzira alcanzamos los 42ºC hace un par de semanas y en Xàtiva los 43ºC. Y, si no cambiamos durante el presente siglo, las temperaturas medias pueden aumentar hasta 7 ºC más; ¿qué haremos en la Ribera si subimos hasta los 48 o 50ºC?, ¿podremos seguir viviendo aquí o se convertirá esto en otro Sahara?
La causa principal del calentamiento global es el aumento del CO2 en la atmósfera debido a las combustiones de automóviles, centrales térmicas, incendios, etc.; este gas y otros similares dejan pasar hacia la superficie terrestre las radiaciones que nos llegan del Sol pero absorben una parte de la emisión infrarroja que la Tierra envía al espacio para equilibrarse, en consecuencia entra más energía de la que sale y el exceso se acumula en forma de calor, elevando la temperatura media de la superficie terrestre. El CO2 es una sustancia natural que absorben las plantas al hacer la fotosíntesis pero al aumentar las combustiones y disminuir la vegetación (cada año desaparecen más de 100.000 Km2 de bosques) se va acumulando en la atmósfera, de manera que hemos pasado desde las 275 ppm que había antes de la Revolución Industrial hasta las 380 ppm actuales.
Los países más concienciados, como Suecia, Alemania o Gran Bretaña, están poniendo en práctica las medidas acordadas en Kyoto para reducir las emisiones de CO2 respecto a los niveles de 1990. Sin embargo, España debería haber limitado el aumento de las emisiones de CO2 a un máximo del 15% sobre las de 1990 y hemos superado el 50%.
Somos uno de los países que más perderá con el calentamiento global y los problemas derivados los tenemos ya encima. Por lo tanto, hemos de cambiar y cuando más tardemos tanto más difícil y peor será; de hecho, Kyoto resulta insuficiente y ya han comenzado las reuniones para buscar nuevos acuerdos que reduzcan las emisiones de CO2 hasta niveles realmente equilibrados.
Soluciones
Las soluciones son de sentido común y se conocen desde hace décadas:
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- Utilizar menos el automóvil particular y conducir racionalmente (sin acelerones, respetando las normas, rechazando los antiecológicos y antieconómicos todo-terrenos).
- Moverse a pie, en bici y en transportes colectivos siempre que sea posible, evitando el avión y el tren de alta velocidad que consumen y contaminan mucho más.
- Aprovechar la luz y el calor natural, adaptar la vivienda a las condiciones de la zona para ahorrar energía, contaminación y dinero.
- Promover el uso de aparatos eficientes (clase A): las bombillas de bajo consumo ahorran el 80% respecto a las de filamento o las halógenas, los aparatos de gas para producir calor ahorran el 60% respecto a los eléctricos, etc.
- Fomentar las energías renovables, especialmente la solar: la superficie de las azoteas podría alimentar de electricidad nuestras viviendas con las actuales placas fotovoltaicas y con los paneles termosolares se podría calentar el agua doméstica.
- Modernizar los procesos industriales para mejorar su eficiencia energética y reducir la contaminación que producen.
- Potenciar la reducción, la reutilización y el reciclaje con recogida selectiva, el papel reciclado; por ejemplo, salva árboles y ahorra energía y agua.
- Proteger bien la vegetación terrestre y acuática que aún tenemos, mejorando la prevención de los incendios forestales, proteger los espacios naturales que quedan y restaurar los que todavía sea posible, rechazar los proyectos urbanísticos que destruyen el entorno y fomentan el uso del automóvil, impedir nuevas transformaciones en las montañas y aterramientos en las zonas húmedas, etc.
- Incrementar las zonas verdes y los equipamientos en las ciudades para mejorar la calidad de vida y reducir o evitar la estampida general de los fines de semana, con los autos contaminando y sembrando de víctimas las carreteras.
- Apoyar a quienes promueven las soluciones y boicotear a quienes las dificultan, como las multinacionales petroleras y automovilísticas, especialmente las norteamericanas, responsables de que el país más contaminante (EEUU emite alrededor del 25% del CO2 mundial, a pesar de que su población es el sólo 5%) no haya firmado el acuerdo de Kyoto.
Los ciudadanos hemos de ser conscientes de la gravedad del problema. Si no empezamos a poner remedio ahora, dentro de pocos años puede ser demasiado tarde, colaborando en las medidas que tienden a resolverlo. Sólo así podremos equilibrar el clima y evitar la ruina y la desertificación de nuestras tierras.
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Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Aunque por esta Web, algunos de vosotros los más ecologistas me empezeis a conocer como "el malo de las carreteras", pues ya que me lucí en algunos comentarios que hice al respecto de la autovía de La Barraca, lo cual he de aclarar que únicamente fue por el principal motivo que es la seguridad vial, tan bien resumido en algún otro comentario; que pregunto si todo ello no valía la pena si con ello se conseguía salvar aunque solo fuese una vida.
En esta ocasión también creo justo comentar que de todas las soluciones que en este artículo se nos plantean, cumplo bastantes de ellas, las cuales enumero a continuación:
- Utilizar menos el automóvil particular y conducir racionalmente (sin acelerones, respetando las normas, rechazando los antiecológicos y antieconómicos todo-terrenos): Siempre he conducido como se recomienda y con vehículos de escasa antigüedad (normalmente pequeños y poco contaminantes), además desde hace unos 5 años no llego a realizar ni siquiera unos 15000 Kms/año.
- Moverse a pie, en bici y en transportes colectivos siempre que sea posible, evitando el avión y el tren de alta velocidad que consumen y contaminan mucho más: Aquí en Alzira, excepto cuando salimos con la intención de hacer grandes compras en la zona comercial, normalmente vamos a píe, ya se encargaron en su día con la peatonalización de gran parte de la Vila de hacer bastante incómodo el uso del coche para moverse por dentro de nuestra ciudad. El avión y el AVE, aunque sé lo que son todavía no he subido a ninguno de ellos.
- Aprovechar la luz y el calor natural, adaptar la vivienda a las condiciones de la zona para ahorrar energía, contaminación y dinero: Por motivos de economía suelo cumplir ellos.
- Promover el uso de aparatos eficientes (clase A): las bombillas de bajo consumo ahorran el 80% respecto a las de filamento o las halógenas, los aparatos de gas para producir calor ahorran el 60% respecto a los eléctricos, etc.: De esto último, ya hace bastante años que soy habitual de las bombillas de bajo consumo, aproximadamente unas 20 habrán en mi hogar, por lo que me parece más bien un chiste la bombillita del plan Ë, el resto de aparatos domésticos en su mayoría los tengo de clase A.
- Potenciar la reducción, la reutilización y el reciclaje con recogida selectiva, el papel reciclado; por ejemplo, salva árboles y ahorra energía y agua: Me encantan las plantas y arboles, ni te imaginas la ilusión que me hace que algunos arboles no me quepan en el balcón con el fin de trasplantarlos a cualquier lugar donde no molesten, ni vayan a ser arrancados (ladera de algún río o terreno sobrante de alguna isleta o vieja carretera).
- Incrementar las zonas verdes y los equipamientos en las ciudades para mejorar la calidad de vida y reducir o evitar la estampida general de los fines de semana, con los autos contaminando y sembrando de víctimas las carreteras: Me encantaría que Alzira en ese sentido fuese como el pueblo nuevo de Tous (que quintuplica la cantidad de metros destinados a zonas verdes recomendados por la UE)
- Apoyar a quienes promueven las soluciones y boicotear a quienes las dificultan, como las multinacionales petroleras y automovilísticas, especialmente las norteamericanas, responsables de que el país más contaminante (EEUU emite alrededor del 25% del CO2 mundial, a pesar de que su población es el sólo 5%) no haya firmado el acuerdo de Kyoto: Siempre me han gustado los coches y te aseguro que si los actuales vehículos eléctricos (bastante primitivos todavía) fueran tan solo en potencia y autonomía similar a la cualquier pequeño utilitario básico, dispondría de un vehículo eléctrico, en la actualidad las únicas alternativas razonables son el Toyota Prius y Honda Civic hibryd, los cuales están demasiado alejado de mi presupuesto. Tan sólo el placer que debe suponer circular con el motor en silencio (cuando lo hace el motor eléctrico en estos vehículos) para mi sería totalmente placentera al carecer de ruido el motor (apenas un ligero soplido tipo ventilador tengo entendido que producen), y contaminación acústica que los mismos no realizan en los momentos que actúan estos motores (que a veces lo hace individualmente o conjuntamente con el de gasolina para incrementar la potencia total).
Por último te diré que lo que realmente hecho de menos cuando circulo por muchas carreteras, es no disfrutar de preciosos parajes compuestos de grandes y centenarios arboles a ambos lados de las carreteras, esto lo he visto en algún otro país y sinceramente es tan precioso, que sinceramente los cambiaría por todos nuestros naranjos, aunque todos ellos son mucho menos productivos y rentables, desde luego son verdaderos pulmones para aquellos países que los disfrutan.
No se pero leyendo el comentario de Quique creo qie todos tenemos una fobia hacia los gringos/ en Mexico se les denomina así porque cuando invadieron este país se les comenzó a llamar así en base a su uniforme verde, grinn, pero la verdad esa nación, a la cual creo que la fobia es simplemente envidia a su capacidad, sino firmo el pacto climatico de ja´+on fue porque tenía al frente de su gobierno al presidente con más baja capacidad mental que haya estado en Washingtón. (cosas de la democracia se voto a Buhs)Pero conozco el país es el que veo que más justamente se lucha por limpiar los ambietes. Y loq ue Quique hecha de menos al circular por sus carrteras, esos parajes llenos de bosques, en USA los encontraria, pues aun en Texas(lo que mejor conozco) los parajes de descanso están siempre junto a arroyos y árboles, a veces mezquites, arbol raquitico del desierto, pero árbol al fin que aporta limpieza a sus aires y si uds viajan a Nueva York encontraran que no es tanto el smog, como pasear por la plaza de Atocha un viernes en la tarde.
Hola MC Quique,
los árboles que citas también los teníamos por aquí, ya que en las carreteras históricas servían de sombra durante los trayectos -que se hacían mucho más lentamente que hoy-. Aquí los teníamos hacia Algemesí por la Creu Coberta y hacia Alberic al menos hasta las viviendas de Hidroeléctrica, ya que recuerdo de pequeño que mi padre nos llevaba para recoger hojas de morera para criar gusanos de seda. Precisamente esos árboles eran los restos supervivientes de las abundantes moreras que hicieron fortuna por estas tierras hasta la implantación del naranjo. Entre los nuevos cultivos, la continua ampliación de carriles, y el estado de abandono que presentan nuestros arcenes y medianas, que una vez ajardinados quedan a la buena de Dios, mal lo tenemos para volver a ver aquellos magníficos ejemplares.
Buenas noches estimado Mascarell, lo de fobia hacia ellos creo que no es mi caso, mucho menos desde la victoria de Barak O´bama, afortunadamente he disfrutado de esos parajes en un país bastante más cercano (Marruecos). Y la verdad es que aunque Alzira haya cambiado bastante, si que he de reconocer que la veo como "demasiado piedra y gris", sobretodo en aquellas partes que se han o se están haciendo peatonales.
Hola Pedro Benedito, cierto lo de las carreteras, la lástima fue como comente en un artículo, es que la mayoría de nuestras viejas carreteras fueron pésimamente diseñadas por nuestros antepasados, a lo que hoy añado que con el aumento del parque automovilístico y tan solo con la eliminación de algunas curvas y construcción de simples arcenes, la mayoría de esos arboles fueron condenados a su desaparición. También en el país del que le hable a Macarell, se sigue dando este hecho (puesto que la cercanía al Sol es mayor y se hace más insoportable, a pesar de disfrutar en casi todo el país de temperaturas más agradables que aquí), pero con una importante diferencia y es que los arboles están mucho más alejados, es decir carreteras de doble sentido con caminos de tierras a los lados (como mínimo 7 u 8 metros, a veces hasta 30-40 metros) y multitud de arboles, además la amplitud de estos caminos más la de la carreteras, como pude ver por los restos desoladores de algunos incendios actuaron de cortafuegos en la mayoría de carreteras que circulan por zonas altamente pobladas de arboles (y todo esto ya lo hicieron tan bien hecho hace muchos años, puesto que las construcciones que junto a ellas a veces hay, lo demuestran).
Hola MC Quique,
compartir lo que me hicieron ver no hace mucho, sobre la razón de porque se hicieron las carreteras antiguamente tan mal (a nuestros ojos), y es porque no se alcanzaban velocidades que obligaran a abrir curvas o inclinar los peraltes, mientras que era más importante adaptarse a las curvas de nivel para evitar el desgaste del animal. Nada que ver con los "caballos" que hoy nos impulsan.
Hola Pedro,
bastante de cierto debe ser lo que tú comentas, a lo que añadiría que en algunos casos (sobretodo en las carreteras más viejas y algunas ya desviadas hará muchísimos años), por los recorridos tan curvados y absurdos (por lo menos en los terrenos en llano) me hacen pensar que además en los antiguos caminos, que en un principio se hicieron para "carretas, animales y personas" y de los que nacieron la mayoría de carreteras de antaño, buscaban el facilitar el acceso todos los pueblos, además de los huertos y barracas que habrían entre los campos, como ejemplo de lo que me hizo pensar en ello es la carretera de Albalat, en concreto desde el tramo que comprende desde Algemesí, hasta Sueca, por el exagerado "zig-zag" de la misma.
Por cierto deje un comentario en esta otra noticia: http://www.elseisdoble.com/vernoticia/2629/matar_la_tierra_para_beneficiar_a_las_constructoras , en el que además de una pregunta que hice, por si algún "seisdoblista" sabía algo de cierto árbol, también hice una interesante propuesta para todos los lectores, a la que seguro que Hayack encantado de ello, nos sorprenderá.
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