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La Navidad limpia las conciencias de los políticos, pero no su vergüenzaArtículo de opinión de Marino Baler
“Aunque a la clase política le parezca increíble, hay gente trabajadora y honrada que prefiere ganarse el sueldo dignamente”
Pensamientos y más cosas
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Marino Baler
Son muy interesantes las costumbres de la fauna. Guiada por el instinto saben cuándo es la época del apareamiento o de emigrar a otros lugares buscando un mejor clima, es un ciclo que se repite año tras año. Nosotros, los seres humanos, también formamos parte de ese círculo; según la época y mes del año en que nos encontremos nos preparamos para una u otra cosa. Ahora toca la Navidad. En esta época parece ser que todos tengamos la obligación de ser felices, optimistas y poseídos por un no sé qué que nos haga mejores personas. Sí, es el tiempo de todo aquello que no hemos hecho durante el año y con un par de paquetes de arroz o litros de aceite nos ponemos la medallita de generosos y limpiamos nuestra conciencia por lo realizado durante los meses anteriores, ya tenemos bula hasta la próxima Navidad.
Pues bien, todo lo que he dicho anteriormente es mentira, una falacia que me acabo de inventar. La Navidad no es eso. Millones de personas en este país no se guían por el calendario, lo hacen por el día a día. Para esa gente hoy será igual que mañana, que pasado o que el 24 de diciembre; de la misma forma que lo ha sido ayer, hace un mes o el 24 de agosto. A millones de personas no se les puede mentir, ni se les puede obligar a que crean que su vida va a cambiar porque alguien les diga “Feliz Navidad” o “Feliz Año Nuevo”… por desgracia, su vida será igual.
Hace pocos días el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, decía que: “En muchos aspectos, la crisis es historia del pasado y estas Navidades van a ser las primeras de la recuperación”. “En muchos aspectos”, ha dicho Rajoy, y yo me pregunto, ¿en qué “aspectos”? Esto me recuerda cuando, para explicar el ‘presunto’ cobro de sobresueldos en negro del PP y la ‘supuesta’ contabilidad en B que aireó Bárcenas, dijo Rajoy eso de: “Todo es falso, salvo alguna cosa”, estamos igual, ¿qué “cosa” no es falsa?
Pero parece ser que desde la clase política se quiere vender que estamos saliendo de la crisis y aprovechando la época navideña nos regalan la ilusión… es lo único que pueden darnos. Aquí no se trata de rebatir si sí o si no, para ello debería apoyarme en datos y cifras que aburrirían y harían este escrito interminable; simplemente doy mi opinión, como otros podrán tener la suya, y cada cual que crea lo que quiera.
Hace unos días escuché en el programa nocturno Hablar por hablar, de la Cadena Ser, el testimonio de una mujer que me dejó helado. Cuando uno no puede dormir y prefiere acompañarse de la radio, escuchar ciertas cosas no ayuda a conciliar el sueño. Justo esa mañana, pocas horas después, como una de esas casualidades del destino en las que nadie cree, escuché las declaraciones de Rajoy sobre el final de la crisis y pensé… ¿los políticos se creen todo lo que dicen o es algo que tienen que decir porque les entra en el sueldo? Está claro que estos vividores de lo público viven en otra realidad y no se enteran que en este país no todos vivimos de la política. Aunque a ellos les parezca increíble, hay gente trabajadora y honrada que prefiere ganarse el sueldo dignamente, aunque las circunstancias actuales se lo impidan. En general, la gente se conforma con que llegue el último día del mes y después de haber pagado sus deudas y necesidades que les quede un par de euros en el bolsillo para tomarse un café, con la tranquilidad de que al día siguiente van a cobrar por su trabajo; eso es todo. No hacen falta ni cuentas en Suiza, ni coches oficiales, ni dos o tres pisos, ni… no, sólo eso: un trabajo que permita vivir con dignidad.
Pero, ¿qué van a saber los políticos de eso? En lo que va de crisis ¡jamás! he escuchado que un político se haya tenido que ir al extranjero a buscarse la vida, que lo hayan desahuciado de su casa o que un mes no haya podido cobrar por ejercer su labor pública (como sí que ha pasado y está pasando con miles de trabajadores), ¿y todavía tienen la poca vergüenza de desear ‘Feliz Navidad’ y regalar ilusión? Tampoco hay que olvidar el mensaje de Nochebuena del Borbón… otro que parece que vaya a llenarnos la nevera y a solucionarnos la papeleta con quince minutos de discurso televisado. Pero no, hoy no me apetece ponerme jacobino.
Hace tiempo que la clase política ha dejado de importarme; antes me irritaban y ahora me provocan desprecio. Como he dicho antes, no voy a explicar los motivos, creo que se entienden lo suficiente, simplemente hay que escuchar lo que dicen y luego mezclarse con la gente, vivir el día a día.
Pero esta vez voy a ser cínico con lo pienso y a creer que en Navidad los deseos se cumplen. Por ello, quiero desear a los políticos de este país unas Navidades como las que probablemente pasará la mujer que escuché en el programa de radio; ojalá la magia de la Navidad se cumpla, si es así puede que empiece a creer que algo está cambiando de verdad.
El Seis Doble no corrige los escritos que recibe. La reproducción de este texto es literal; fiel a las palabras, redacción, ortografía y sentido del autor/es.
Mariano Rajoy a los medios de comunicación:
“Las primeras Navidades de la recuperación”
Isabel en ‘Hablar por hablar’:
“Nos han cortado la luz, el gas y no tenemos dinero ni para comer”
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Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Muy buen artículo, aunque dudo mucho que los políticos se escuchen ellos mismo, y también dudo que lleguen a mezclarse con el pueblo y a sensibilizarse en nuestra lucha, la de salir día a día adelante. Labor muy difícil y complicada para el Españolito de la calle, sin carnet de ningún partido. Estoy esperando que caiga el meteorito que termine con la humanidad, para que al volver a empezar empecemos todos de cero, sin tantas diferencias ni injusticias. Ese es mi deseo, pues mi nevera no se llena solo deseándolo, ni mis zapatos se arreglan deseándolo, ni mis facturas se pagan deseándolo.
En mi casa la noche del 24 será Navidad porque encenderé el radiador, cosa que no hago habitualmente.
Rajoy nos miente. La realidad es el segundo audio.
Primero crean pobres y después les dan limosna , eso es lo que esta ocurriendo, un año parado sin cobrar para poder acceder una familia al nuevo subsidio,
de seis meses, menuda limosna , ¿alguien ha pensado como estará esa familia después de un año sin ingresar un euro?
Todo esto que esta ocurriendo en este país , espero que lo paguéis caro el día de las votaciones y nunca mais volváis a estar al frente de este país. El miedo a perder os esta volviendo locos, a los que estáis y toda la camarilla de palmeros y protegidos.
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