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Lidia Enguix Palomares y Valeria Oliver García del Busto serán las máximas representantes de las fallas de Alzira en 2017Las dos falleras mayores electas pertenecen a las comisiones de Camilo Dolz y Colònia Ana Sanchis
Las fallas de Alzira ya han elegido falleras mayores para 2017. El Gran Teatro, marco habitual para este tipo de eventos, registró una gran entrada de público que no quiso perderse las que van a ser las principales representantes del mundo fallero.
En los palco de autoridades, entre otros, se encontraban Isabel Aguilar, vicealcaldesa; Pepe Grau e Inmaculada Onrubia, del equipo de gobierno; José Manuel de la Cámara, representante del Partido Popular; María José Llopis y José Luis Ruiz, representantes de Ciudadanos; Laura Gomar y Almudena Molina, fallera mayores de Alzira de 2016, junto con sus respectivas cortes de honor y Vicente Muñoz, presidente de la Junta Local Fallera
En primer lugar subieron al escenario las candidatas a fallera mayor infantil de Alzira. Después fue el turno para Lidia Enguix Palomares, única candidata a fallera mayor de Alzira. Todas ellas pronunciaron un parlamento de presentación en el que mostraron sus ilusiones y sus sueños por conseguir ser la fallera mayor de Alzira. Una vez finalizados estos discursos protocolarios se requirió la presencia de los miembros que formaban la mesa electoral: Miguel Gallud, notario y el secretario general y vicepresidente de la Junta Local Fallera Fernando Iñigo y José Luis Rojas, respectivamente. Los presidentes de las comisiones falleras de nuestra ciudad y personas delegadas a tal efecto fueron pasando por las urnas para depositar sus votos. Mientras los miembros de la mesa hacían el recuento de votos, se acrecentaban unos lógicos nervios entre las candidatas y sus allegados. El presentador del acto, Salva Roses, recibió de manos del notario los sobres con los nombres de las dos nuevas falleras mayores electas, que resultaron ser Lidia Enguix Palomares, de la falla Camilo Dolz y Valeria Oliver García del Busto, de la falla Colònia Ana Sanchis. Tras la elección, las muestras de alegría se desataron entre las candidatas, familiares y miembros de sus fallas allí presentes.
Después de la elección, las cortes de honor para las fallas de 2017 quedan compuestas de la siguiente manera:
Corte de honor de la fallera mayor infantil de Alzira 2017
Laura Galán Plá.
Tania Monte Boronat.
Consuelo Pérez Montalvá.
Ariadne Peña Palacios.
Marina Peña López.
Claudia Gamero Hernández.
Corte de honor de la fallera mayor de Alzira 2017
Elena Grau Calvo.
Andrea Doménech Martínez.
Estela Sanchis Hermita.
Azahara Amparo Chueca Roca.
Laura Ull Tudela.
Mireia Puig Guerrero.
Texto y fotos: Hayack
a través del correo electrónico [email protected]
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Vaya por delante, mi más sincera enhorabuena a las dos Falleras Mayores electas para el 2017, Lidia y Valeria, así como para las que serán sus Cortes de Honor.
En ningún momento pretendo cuestionar el resultado de esta elección, ni poner en duda los méritos y capacidades de la elegidas como Falleras Mayores, o como Cortes, pero una vez más tenemos que lamentar que el Reglamento Fallero de Alzira quede relegado y vulnerado por la propia Junta Local Fallera que tendría que ser su principal garante. Todo ello con la connivencia de los propios padres de las candidatas, que se han prestado al juego, y con el escaso o nulo interés de la propia asamblea general de la Junta Local Fallera.
El Reglamento Fallero de Alzira establece una doble elección, por un lado se debe elegir en elección independiente a la Fallera Mayor y por otro en un nuevo proceso al margen del anterior a la Corte de Honor. El sábado 4 de junio, lo que se hizo, saltándose el Reglamento es improvisar un sistema de elección en votación única, en el que cada elector/a asignaba un único voto a una de las ocho niñas que optaban al cargo de Fallera Mayor (la mayoría fraudulentamente ya que en realidad lo que querían era quedarse en la Corte, no ser Fallera Mayor). Con este método no se permitía en ningún momento valorar la idoneidad de las componentes de la Corte de Honor, ni establecer un rango de preferencia de unas sobre otras por parte de cada elector, simplemente la candidata que más votos obtenía se convertía de facto en Fallera Mayor Infantil para el 2017 y la que menos votos obtenía quedaba fuera de la Corte, al haber ocho candidatas.
El hecho de que los electores asignen un solo voto a la candidata que teóricamente desean que sea Fallera Mayor, da como resultado que la formación de la Corte de Honor quede a expensas de la suerte o hace que los teóricos empates a votos, queden a expensas del desempate por mayor historial, o subsidiariamente por el hecho de haber sido Fallera Mayor Infantil de comisión, o en última instancia aplicando el criterio de la mayor edad.
En conclusión:
Los electores que han votado a la candidata que consideraban mejor para Fallera Mayor, en realidad no han elegido a la Corte de Honor.
Aquel elector/a que libremente ha optado por “salvar” a una niña, con su voto, para que se quede en la Corte, en realidad ha dejado de votar a la que realmente consideraba más idónea como Fallera Mayor Infantil, cosa que también altera el resultado de la votación, en este caso por arriba.
Y por último, los reglamentos falleros son en la práctica papel higiénico para ser usado en los casales.
Por no hablar de la vergüenza que produce el mercadeo de votos, organizado por algunos padres y presidentes, o la falta de respeto de algun elector que se levanta en plena alocución de las niñas a hidratarse al bar de la esquina, tal vez por el calor del momento. En fin, como suele decirse, tenemos lo que nos merecemos.
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