Para reducir el tiempo, hemos preparado estos criterios que te ayudarán a dar con el sofá cama perfecto
… necesitas algo de espacio extra por si acaso se presentan amigos o invitados en cualquier momento. Es una práctica solución que evita que tengas reservado un cuarto específico para esta función.
… necesitas tener un lugar en donde dormir en un despacho, o en una segunda casa.
… vives en un lugar pequeño y ahorrar espacio es una prioridad. En este caso, los muebles transformables son tu solución. Puedes tener un mueble que sirva como sofá por el día, pero que se convierta en cama cuando llega la noche.
Aquí se complica un poco más la cosa, y es que existen diferentes tipos de sofá cama:
- Clic-clac: son aquellos que se abre con un sistema sencillo de “clic clac” (este nombre lo recibe en relación con el sonido que hacen al abrir y cerrar). Digamos que tienen un plegado que se asemeja a la forma de un libro.
- Deslizantes: a diferencia de los anteriores, estos se abren cuando estiramos la base del sofá hacia adelante. Llegará hasta un tope y tendremos que activar algún que otro mecanismo para sacar la otra parte de la cama.
- Desplegables: son más caros que los anteriores, pero tiene la ventaja de que cuentan con un colchón que se esconde por completo cuando se recogen. La espuma que forma parte del sofá no lo hace del colchón, por lo que se consideran más cómodos.
- Futón: no es un sofá cama al uso, pero también lo vamos a contemplar aquí. En esencia, son colchones que se colocan en el suelo directamente para dormir. También se pueden usar como sofá a ras del suelo, usando un respaldo.
Teniendo en cuenta que a un sofá cama se le va a dar el doble de uso que a un sofá convencional (de día para sentarnos y de noche para dormir), es imperativo apostar por un modelo de calidad, preparado para aguantar el uso y el paso del tiempo.
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El precio no lo puede ser todo, pero es innegable que es un factor crucial a tener en cuenta. Encuentra un equilibrio entre la calidad y el precio antes de tomar cualquier decisión.
Estos son los 4 factores por excelencia que no debemos olvidar para comprar un buen sofá cama. Así te harás con un modelo cómodo, y que a la vez aguante todo lo que haga falta.
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