Estudios indican que los alimentos orgánicos son más nutritivos que los cultivados tradicionalmente
En los últimos años se ha registrado una creciente demanda de los consumidores de alimentos orgánicos (OF). En el continente europeo, Alemania ocupa el 30 % del mercado de productos orgánicos, seguida de Francia (18 %) y Reino Unido (9 %).
Por su parte, España es uno de los 10 mercados que más consume este tipo de alimentos y lidera la superficie destinada al cultivo de producción ecológica, con casi 2 millones de hectáreas, según el informe Organic in Europe, Prospects and Developments 2016, de la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica (IFOAM, por sus siglas en inglés).
En ese contexto, se está desarrollando una serie de estrategias en distintas comunidades para convertirse en una potencia líder de la producción ecológica a nivel mundial. Un caso concreto es Alzira, municipio español de la provincia de Valencia, en la Comunidad Valenciana.
Desde el pasado mes de septiembre, 20 vecinos y vecinas de Alzira participan en un curso de formación básica en agroecología enmarcado en el proyecto “Orígenes” que se ha llevado a cabo en la ciudad desde hace dos años. La iniciativa fue coordinada por el Ayuntamiento, a través del Centro de Participación Ciudadana y del área de Agricultura, la fundación Cepaim y la oenegé ‘El Norte Perdido’.
“La finalidad principal de esta formación es capacitar y dar herramientas a los participantes en el autocultivo doméstico, de esta manera se garantiza un mayor autoabastecimiento de alimentos de calidad y de kilómetro cero. Estamos muy satisfechos con el buen funcionamiento de esta iniciativa, que ha tenido una gran acogida en la edición de este año, hasta el punto que ha sido necesario crear dos grupos de trabajo para su formación”, destacó Marina Mir, concejala de Servicios Sociales.
El proyecto “Orígenes” tiene como objetivo brindar información relevante en materia de seguridad alimentaria. La organización asegura el riguroso cumplimiento de valores y principios vinculados a la agroecología, puesto que al observar la industrialización alimentaria, ha incrementado la intranquilidad relacionada con la calidad de los alimentos transgénicos y el uso de pesticidas y antibióticos en la agricultura convencional.
Además, estudios indican que los alimentos orgánicos son más nutritivos que los cultivados tradicionalmente. Según la Universidad de Newcastle (Reino Unido) los alimentos orgánicos -como frutas y verduras- pueden contener entre 18 a 69 % más antioxidantes.
Un caso concreto es el período de montaje de la plantación de mangos donde se aplica con regularidad compost y abono verde. El proceso de compostaje de la agroecología es de primera calidad, por tanto, la planta dispone de suficientes nutrientes en la fructificación. De esta manera, la formación del fruto posee un alto contenido de vitaminas antioxidantes como la vitamina A y C, los cuales contrarrestan los radicales libres relacionados con las enfermedades cardiovasculares.
Asimismo, según el Journal of Agricultural and Food Chemistry, las cebollas orgánicas tienen aproximadamente un 20 % más de contenido de antioxidantes que las cebollas convencionales.
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