Artículo de opinión de Xavier España
“Facilitó las cosas dejándose querer y agasajar. A buen seguro que no tenía la conciencia tranquila, pero supo estar”
Fue increíble el trato que los aficionados le dieron a Villa en la Convenció de Penyes celebrada recientemente en la sala Rex Natura de Alzira. A los cerca de 1.300 peñistas no se les escapó ni un sólo reproche durante la corta estancia del Guaje. Todo fueron parabienes, fotos, autógrafos, abrazos y muestras de cariño por parte de niños, jóvenes, hombres y mujeres de todas las edades y condición.
El Guaje facilitó las cosas dejándose querer y agasajar. A buen seguro que no tenía la conciencia tranquila, pero supo estar.
La sufrida afición valencianista ya no se acordaba de los devaneos de su novio, El Guaje, con el Real Madrid, ni de los posteriores flirteos con el Barça, con cuyo secretario técnico tuvo incluso un body-body en un solitario rincón de Asturias.
Ni el padre Florentino, ni el frare Laporta consiguieron llevarlo a sus respectivos altares. El obispo Llorente logró convencerlo para la causa y que el Guaje continuara siendo el novio de la afición valencianista.
Por cierto que el actual presidente del consejo de administración del Valencia fue el último en abandonar la sala Rex. Tras el histórico abrazo con su Guaje, que plasmaron un montón de cámaras, no dejó de sonreír ni de abrazar a todo el que le salió al paso hasta que el salón quedó completamente vacío.
Sin duda que el 25-J pasará como una fecha histórica para Alzira, para El Guaje y para la afición del Valencia. Atrás quedó un mes de desamor y de nervios porque al Guaje valencianista le salían ricas y guapas novias, sobre todo la blanca y la azulgrana, que iban acompañadas de sugestivas dotes.
Desde algunas portadas de periódicos, cadenas televisivas y columnistas agradecidos le pusieron precio al ultraje. Pero David, ayudado en esta ocasión por su desarmada pero fidelísima hinchada, logró derrotar a los dos Goliat, pese a estar pertrechados con potentes y peligrosas armas mediáticas.
No cabe duda de que algún día Villa y la afición valencianista se dirán adiós, sino al pie de la escalerilla de un avión, sí pisando el viejo o el nuevo Mestalla. Pero a buen seguro que en su despedida se dirán "siempre nos quedará Alzira".
Xavier Espanya
Comentarios de nuestros usuarios a esta noticia
Villa eres una maravilla eres el mejor !
A este señor solo le interesa el dinero como a todos, incluso a mi
¿Tú crees que le "quedará" Alzira? ¿No crees que para él fue una obligación venir a recoger un trofeo que igual acaba en la basura? Si dentro de unos meses le preguntan donde está Alzira ¿sabría responder? Yo de estos (los futbolistas) no me creo nada. Por un montón de euros nos hubiera dejado a los valencianistas; lo del romanticismo en el fútbol ya es historia. Chau
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