En el acto se congregaron un número considerable de fieles
Un buen número de personas se congregaron anoche en el tradicional "Toque de silencio" que organiza la Cofradía de la Crucifixión de Jesús en la Cruz.
Este acto se celebró por primera vez el Jueves Santo de 1986, también conocido en el ámbito castrense como “Silencio americano”, por la participación de una corneta frente al dosel de la Cofradía.
Años después, en 1994, la recién creada banda de tambores de la cofradía incorporó a un trompetista profesional en el toque de silencio.
Con el paso del tiempo, el acto ha logrado un reconocimiento popular; el Cristo es llevado a hombros de cofrades por las vías adyacentes al dosel, acompañado por numerosos de fieles.
Al final del toque, el Cristo crucificado es levantado por los cofrades, rompiendo el silencio en ese momento por el toque de tambores mientras se le vuelve a situar la imagen en el dosel de la Cofradía.
A continuación, en agradecimiento a los asistentes de este acto, la Cofradía ofreció a los fieles chocolate caliente con fartons.
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